sábado, 24 de diciembre de 2011

Navidad en Nicaragua

Y como si nada...la Navidad nos pilló en Nicaragua!
Abandonamos México, después de tres días en bus pasando por Guatemala, Salvador y Honduras. El país nos recibió de noche, con una calor horrible y sin dólares...
Suerte que encontramos un chico muy amable que nos prestó dinero para llegar a Granada, nuestro destino final por el momento.
Tenemos que decir que también que pasamos el país sin revisar nuestras maletas ya que cuando nos disponiamos a pasar nuestras cosas por revisión el guárdia nos dijó que no hacía falta, porqué jugaban el Barca-Madrid y tenian mucha prisa!
No nos lo podíamos creer... bromeamos dijiendoles que llevabamos drogas y armas en la mochila per ni así! Enfin...el futbol...
Así pues, llegamos a Granada y ya estamos instaladas en la casa de los voluntarios del proyecto. Somos unos 22, ciento y la madre cómo dicen aquí!
Estamos metidas en los proyectos de la escuela de verano, dónde vamos cada dia a la escuelita pasando por caminitos de campo, algun caballo y alguna que otra gallina. Además, Laura da clases de inglés a niños y adultos, Blanca está con el grupo de jóvenes haciendo teatro y estamos intentando continuar con un proyecto de mujeres.

Y cómo deciamos, aunque aquí sea verano...la Navidad nos pilló por sorpresa!
Vamos a vivir unas fiestas diferentes, sin esas comilonas de horas y horas, con otras famílias, con calor y manga corta, y con un poquito de nostálgia de todos los nuestros! Aún así, disfrutad del cava y los turrones, que nosotras nos consolaremos y con un coco en la mano en la hamaca de alguna playa...


Bones Festes a tots!

lunes, 5 de diciembre de 2011

San José del Pacífico - Oaxaca- San Cristóbal

Qué atrás queda Mazunte...
De esos días podemos decir que aprovechamos la gran compañía, las playas y el festival de jazz. Hasta hicimos un pequeño negocio con tortillas de patatas, y estuvimos vendiendo por la calle como las mamitas! Todo un éxito, aunque algunos no entendían que era un plato al que no podían agregar salsa picante... esto es México.

Días más tarde, y después de duras despedidas en ese precioso lugar, nos fuimos hacia San José del Pacífico.
Un rincón en la sierra de Oaxaca, llamado así porque sus nubes toman forma de olas y el cielo parece mar.
Ese pueblito es famoso por la producción y la toma de sus hongos alucinógenos y por sus bonitas montañas. Estuvimos unos días en un hostal y luego nos fuimos con Andrea, nuestra compañera del negocio de las tortillas, hacia unas cabañitas regionales en medio de la montaña. Fueron días fríos y tranquilos de recojer leña, cocinar a fuego lento y disfrutar del arte de la conversación.
Tenemos que confesar que también hicimos negocios en estas tierras... una mamita se enamoró de la lana que traía Laura en su mochila e hicieron sus trueques: Laura cambió un par de bultos enormes de lana por muchas cosas tejidas a mano. Estamos que nos salimos!


Dejamos la tranquilidad de San José para llegar otra vez a San Cristóbal de las Casas, no sin pasar por la temible carretera hasta Oaxaca, pasar el día en su mercado-laberinto lleno de paraditas de brujería y acabar en un bus de 12 horas con sorpresa incluida: No teníamos asiento! Así que sentadas en el pasillo del bus, aprovechamos para dormir un poco y hacer amigos que nos iban dando ánimos cuando las curvas nos llevaban de un lado a otro.

Así pues, os escribimos desde San Cristóbal, descansando y preparándonos para el viaje que nos espera a partir de mañana, y es que por fin vamos a salir de este país maravilloso que es México para ir a Nicaragua directamente, ya que el tiempo se nos echó encima. Eso sí, amenazamos con volver!

Esperamos esta vez tener asiento...